Zona: Océano Atlántico
En cuanto a su tamaño, pueden alcanzar desde 90 centímetros hasta un metro y medio en la edad adulta y pesar aproximadamente 15 kilos.
Como seguramente ya has adivinado, la feroz morena es un pez carnívoro que se alimenta de peces pequeños, crustáceos y moluscos, especialmente sepias y pulpos.
Al ser un pez muy poco consumido en la actualidad, su caza no suele ser frecuente. No obstante, los buzos aficionados utilizan arpones en pesca submarina, aunque también es común la pesca con señuelo o desde la costa.
La fase reproductiva de la morena está poco documentada. Se sabe que su ciclo de reproducción empieza en la temporada de invierno y que cada hembra puede colocar unos 60.000 huevos en cada temporada.
Debido a la ausencia de datos, se desconoce las características del proceso de madurez sexual y apareamiento o si se trata de un pez con características hermafroditas.
A pesar de su peculiar aspecto, la morena es un pez perfectamente comestible. Y no solo eso: en la época romana su carne era tan apreciada que solía servirse asada o hervida en ocasiones especiales, como los grandes banquetes imperiales. Eso sí: era muy importante que los cocineros de la época hirvieran la carne antes, ya que se consideraba venenosa.
En las Islas Canarias suele ser un plato común y por lo general, se deja macerar su carne en adobo durante aproximadamente 4 horas antes de freírla